1. Una solitaria y vieja hembra es desde el año pasado el último ejemplar de la especie
2. • Las visitas al parque cayeron un 3,5% en el 2008, pero los gestores lo atribuyen a la lluvia
ANTONIO MADRIDEJOS
BARCELONA
El Zoo de Barcelona tendrá finalmente un nutrido grupo de elefantes en un espacio amplio y moderno, más acorde con los nuevos tiempos del conservacionismo, y no una hembra anciana y solitaria dedicada a deambular por una instalación llena de desconchados, que es lo que sucede actualmente. Conseguir un elefante no es nada fácil por diversos motivos, como la escasa fecundidad de la especie y la protección que pesa sobre ella, pero los responsables del parque esperan que el primer proboscídeo llegue en el 2010 o el 2011. El objetivo es lograr una colonia con un macho y cuatro o cinco hembras "que vivirían en el recinto de la Ciutadella, no en el Besòs", insiste el presidente del Zoo, Ignasi Cardelús, para dejar claro que la vieja sede del centro urbano aún tiene futuro.
Cardelús presentó ayer el balance de visitas e inversiones del Zoo en el 2008, un año de transición que se caracterizó por un ligero descenso del número de visitantes. Fueron exactamente 1.064.541, un 3,5% menos que los 1.102.939 del 2007, aunque los responsables del Zoo no le dieron excesiva importancia y lo atribuyeron al mal tiempo que caracterizó muchos fines de semana, especialmente en otoño. El presidente del Zoo destacó que, con más de un millón de visitas por tercer año consecutivo, el parque se ha consolidado como la segunda instalación municipal más visitada de la ciudad después del Museu Picasso.
Cardelús insistió en que el nuevo proyecto en el Besòs no supondrá un recorte presupuestario en el viejo recinto de la Ciutadella. Según las cifras aportadas por el presidente del Zoo, el dinero gastado en inversiones, reparaciones y mantenimiento en el 2008 ascendió a 3,7 millones de euros, frente a los 3,1 millones del año anterior y los 4,5 millones previstos para el presente ejercicio. El principal gasto se destinará a una gran instalación para los jóvenes dragones de Komodo, que se están convirtiendo en unas auténticas bestias, y a proyectos de reciclaje y puntos verdes de recogida. La instalación de los dragones será, dijo Cardelús, un anticipo de lo que pueden ser las futuras instalaciones del Zoo, aunque no dio muchos más detalles.
LA MATRIARCA DE LA FAMILIA
En cuanto a los elefantes, la hembra Susi vivie sola desde que la otra hembra que le hacía compañía, Ali, muriera el año pasado debido a un cólico intestinal. "Los nuevos animales vendrían de otro zoo, lógicamente, y formarían parte de algún programa científico", precisa Lluís Colom, jefe de conservación del recinto. Hace un par de décadas, Barcelona había llegado a tener cinco elefantes, pero técnicamente no eran una colonia nutrida puesto que había dos de la variante africana y tres de la asiática. Además, estaban mucho más apretados de lo que ahora se pretende. La nueva familia no se situará en el emplazamiento actual, sino en un lugar nuevo y mayor "que no se puede precisar todavía".
Colom explica que Susi podría ser la matriarca de la nueva colonia. La elefanta, que llegó a Barcelona procedente del zoo de Madrid, tiene unos 50 años, una edad más que respetable para un ejemplar en libertad --de hecho, su piel y sus deteriorados colmillos muestran el implacable paso del tiempo--. El Zoo empezará a trabajar en la nueva instalación y en los nuevos fichajes este año, pero en el mejor de los casos no habrá colonia nueva de proboscídeos hasta finales del 2010.
